Cultura Celta

Los celtas fueron originados de sociedades tribales conformados por indo-europeos que se comunicaban con el lenguaje celta durante la Edad del Hierro (1200 A.C.-500 D.C.). Estas culturas se desarrollaron principalmente en el centro de Europa y se fueron expandiendo debido a la migración a lugares como las islas Británicas y Francia, aunque después se expansión se vio limitada e incluso reducida debido a la expansión del Imperio Romano (evento que también romanizó varios asentamientos celtas que quedaron bajo el imperio Romano). Los primero registros que se tienen de las ciudades celtas indican que adoptaron una estructura de gobierno regida por un rey, estableciendo una relación cliente-patrón parecida a la de los romanos, y una estructura social separada por clases (guerreros y aristócratas, intelectuales y los comunes). Los títulos nobles de oficiales y reyes eran pasados por medio de la tanistry, el cual era un sistema en donde los títulos y tierras eran pasados por jerarquía de mando al siguiente inmediato.

  

Vestuario

Durante la etapa tardía de la Edad del Hierro las tribus celtas vestían túnicas o camisas de manga larga junto con pantalones conocidos como braccae y ocasionalmente capas, principalmente en invierno. El material común de la fabricación del vestuario era algodón, lino y la seda para las clases nobles. En cuanto a la ornamentación se acostumbraba usar broches y guardabrazos con el símbolo de la familia y collares de oro. En cuanto a los guerreros, éstos portaban escudos pintados con los símbolos de sus casas, camisas de manga larga y diferentes tipos de correas y tirantes que les ayudaban a cargar equipo, además portaban cascos ornamentados y con un diseño característico que los destacaba de otra cultura, un ejemplo de eso es el caso de Waterloo que se encuentra en el museo de Inglaterra.

Vestimenta de un guerrero celta

 Arte

El arte celta tiene una gran semejanza al art nouveau, ya que en gran parte retratan figuras parecidas a las hojas y ramas, haciendo un uso amplio de círculos, trisquel, espirales y triángulos; la combinación de todas estas figuras daban un gran parecido a la naturaleza (de ahí el parecido con el art nouveau). El arte celta se puede observar principalmente en piezas de metal como espejos, collares y escudos, es decir, el arte celta era usado para ornamentación más que para recreación. 

Pintura celta con un trisquel en medio

 Religión

Como la mayoría de las tribus de la Edad del Hierro, los celtas tenían una ideología religiosa politeísta, además, también llevaban a cabo sacrificios humanos y ritos los cuales eran dirigidos por sacerdotes llamados druidas (de los cuales se creía que podían transformarse en animales y rencarnar). Una característica de los celtas en la religión es que originalmente no le habían asignado a sus dioses forma humana, si no, elementos naturales y por lo tanto sus altares eran situados en áreas remotas como lagos, colinas y bosques. Al momento de la expansión celta, los dioses celtas fueron modificados dependiendo de la zona en donde se encontraban, lo que generó que al final se tuvieran registros de cientos de diferentes dioses celtas (la mayoría con similitudes a otros).